La casa árbol del terror: el ranking

A Kang y a Kodos les parecerá una locura publicar una entrada sobre especiales de Halloween de Los Simpson en enero, pero el caso es que es que en octubre, cuando se me ocurrió la idea, este pequeño rincón en internet (que se acerca peligrosamente a las cien visitas diarias; por ahora es un triunfo) no había nacido. Así que se quedó en mi cabeza hasta hoy, que es cuando lo he rescatado. Hoy, en THE R LOUNGE, el sitio más groovy de la red (groovy es una palabra que transmite como no lo logran todos sus equivalentes en español juntos), con todos vosotros, el ránking definitivo de las secuencias de opening de Halloween de Los Simpson.

Para el despistado que no sepa de qué demonios hablo (entonces, ¿qué haces aquí metido?), daré una explicación rápida (más rápida que la de lo de las portadas de Mortadelo y Filemón, lo prometo): cada año, es tradición que Los Simpson dediquen en octubre (o cuando caiga) un episodio especial dedicado a Halloween, lleno de historias paranormales, terroríficas o, como viene siendo habitual en los últimos años, demasiado absurdas para los episodios normales. Son tres historias por episodio, y siempre vienen precedidas por una pequeña secuencia a modo de introducción, a veces mejor y a veces peor, y ese es el meollo de nuestro post de hoy.

Mi primera idea fue organizar la lista en orden cronológico, para poder supurar veneno por las teclas al dar buena cuenta de la imparable decadencia de los especiales de Halloween de Los Simpson, pero luego pensé “¿tal vil soy?”. Y la respuesta fue que sí, y que si quería potenciar la sensación de decadencia, debía ordenar los openings en un ránking, porque la decadencia cronológica de éstos no es TAN matemática. Pero tranquilos, esto podría destilar aún peor karma: podría haberlos ordenado de mejor a peor y haber convertido el pódium en un LOS TRES PEORES OPENINGS DE HALLOWEEN DE LOS SIMPSON. Pero no es así.

El episodio da asco, pero por esta Marge, se lo perdonamos todo.

Antes de comenzar, voy a adelantarme al que advierta que en un top en el que deberían participar veinte secuencias sólo hay diecinueve puestos. No, no es que haya dejado fuera al peor de todos por educación, jamás dejaría pasar una oportunidad de poner a caldo algo así. Lo que pasa es que he dejado fuera al cuarto especial, La casa árbol del terror IV, por no tener una introducción propiamente dicha. Sí, tiene el recorrido por el cementerio habitual por aquella época, pero he estimado que una verdadera introducción de Halloween debe tener algo más que esta cabecera genérica. Así que se ha quedado fuera, lo cual es una pena, porque el nexo conductor del episodio, una galería con cuadros terroríficos (¡perros jugando al póker!) es muy bueno, y un insólito cambio en la saga halloweeniana en aquél momento.

Una vez hechas las explicaciones, vamos allá. Recuerdo: vamos de peor a mejor, así que las virulentas críticas y accesos de ira irán diluyéndose poco a poco para dejar paso a agotadores adjetivos halagadores y rimbombantes.

19º) La casa árbol del terror XX: El horror. La secuencia introductoria de Halloween más insoportable de la historia de Los Simpson. Tras ver la que ocupa el puesto 18 de la lista, dudaba de que el siguiente pudiera ser aún más infecto, pero contra todo pronóstico los Genios De La Serie lo lograron. En lugar de recurrir a lo seguro, o a cosas más obvias pero efectivas, en esta ocasión esos Guionistas Que No Dan Puntada Sin Hilo (en cierto foro en español sobre la serie hay un tipejo que habla así, lo juro) se sacan de la manga una imposible mini-historia que huele a desecho de un guión rechazado y reciclado con monstruos de protagonistas. No se sabe a qué viene, no se sabe a dónde va. ¿Qué es eso de poner a Frankenstein disfrazado de Bob Esponja en una fiesta de los Simpson y teniendo que vérselas con su esposa? ¿O la Krabbapel liándose con un Drácula disfrazado de Iron Man? En este punto, Elvis habría disparado contra la pantalla hace mucho, y yo estoy en posición de afirmar que he rascado cosas más interesantes del fondo del cubo de basura de mi casa. Por si os los estabais preguntando, sí, el episodio sube de nivel después (¿qué otra cosa podía hacer?).

18º) La casa árbol del terror XIX: En el colmo de la desidia, la secuencia de apertura de este año, más caduca que un bote de mayonesa en la ventana, cuenta cómo durante las elecciones Obama/McCain, Homer es asesinado por… por la cabina de voto, esto último más que nada para justificar la inclusión de esta memez en un especial de Halloween. Contra la incompetencia, referencias a un tema de actualidad que libere la risa floja y que al día siguiente ya no haga gracia. Sí, aquel segmento del séptimo Halloween se ambientaba en las elecciones Clinton/Dole, pero sus responsables fueron lo suficientemente hábiles como para llenarlo de chistes más genéricos, válidos en el 96 y válidos hoy. Pero qué digo, si esta secuencia es igual, ver a Homer asesinado por una cabina de voto no entiende de fechas.

17º) La casa árbol del terror XV: Si hubo un tiempo en el que los especiales de Halloween de Los Simpson se esforzaban un poquito, si no en dar miedo, en crear un ambientación inquietante desde el minuto 1, este Halloween fue el primero en darle una descomunal patada en el culo a este principio y pasarse por el forro el espíritu de las Casa árbol. A alguien se le ocurrió que para ambientar el episodio en Halloween bastaba con sacar a Kang y a Kodos, lo que estén haciendo importa bien poco. Por lo tanto, con este especial tuvimos que sufrir una abominable telecomedia de dos minutos protagonizada por los rigelianos, con risas enlatadas y todo. Y, como apunte personal (todo lo demás es demoledoramente objetivo, negadlo si os atrevéis), la mecánica animación del tentáculo sellando el “XV” bajo el título del episodio me resulta tan horrorosa que sólo con pensar en ello me entran sudores fríos. La canción no ayuda.

16º) La casa árbol del terror XVI: La racha de desmitificación de los Halloweens simpsónicos continúa en esta intro, la segunda chorrada seguida protagonizada por Kang y Kodos. Eterna, sin una pizca de gracia, y tan apropiada para Halloween como una lectura en corro de Orgullo y prejuicio (sin zombies). Ciertamente no es tan penosa como la de la sitcom, pero no le va mucho a la zaga.

15º) La casa árbol del terror XIII: Apatía pura es lo que me transmite esta intro, una de las primeras en mostrar agotamiento. Sesión de espiritismo, el fantasma de Maude (que posiblemente provocó su muerte para no tener que ver asociado su nombre a los episodios que estaban por venir de la serie) y unos cuantos gritos, por aquello de que es Halloween. Un enorme y bien merecido “meh”.

14º) La casa árbol del terror XII: Entonces no lo sabíamos, pero éste fue el inicio de la fea costumbre de poner como introducción halloweenesca una secuencia que más que una presentación es una pequeña historia en sí mismo, la mayoría de las veces muy, muy, muy poco inspirada y bastante frustrante (“¿qué coño me estáis contando?”). Consuelo de tontos: ésta es la mejor. Pese al Burns amante de Halloween que está a kilómetros de distancia del mejor Monty, a la estupidez de la verja cortante y a la sucesión de tonterías rebuscadas… Y pese a que precede al que podría ser el peor especial de Halloween de todos.

13º) La casa árbol del terror XVIII: La nostalgia nos invade al ver a Marge presentando el especial de terror anual, aunque no sea saliendo de detrás del telón, y esto redime un poco a la secuencia. ¿O no? Al fin y al cabo es un descorazonador ejemplo de lo que serían las clásicas presentaciones de Marge hechas hoy. Que las promos de otras series molesten a Marge tiene su gracia, pero a estas alturas de la serie, es el tipo de chiste que a los guionistas les gustaría meter en la serie pero no pueden porque se sale de lo real, así que se lo guardan para Halloween y listo. Triste.

12º) La casa árbol del terror XIV: Otra muestra de las pequeñas historias confusas como presentación de Halloween, aunque gana puntos por lo ciertamente perturbadora que resulta, con la familia agrediéndose entre sí violentamente. Sí, bueno, sería mejor sin la insoportable intervención de Kang y Kodos. No hay muchas formas más efectivas de reventar totalmente la efectiva ambientación conseguida hasta el momento.

11º) La casa árbol del terror XVII: Una intro que podría haber estado fácilmente en un puesto más alto de no ser por la odiosa costumbre de la serie desde cierto punto en adelante de sobrecargarlo todo con chistes. La idea es genial de puro obvia: poner de presentador del especial anual al señor Burns en una parodia de Cuentos de la cripta. Pero la caída por las escaleras sobra, el corte súbito de la presentación para mostrar a Moe diciendo chorradas sobra, y el exceso de animación digital chirría. Por lo demás, es un placer volver a comenzar una Casa árbol con rayos, truenos y motivos terroríficos (recordemos que los dos especiales anteriores tuvieron como portagonistas a Kang y Kodos haciendo estupideces).

10º) La casa árbol del terror X: Lo admito, tal vez esta intro (presagio de los espantos que protagonizarían Kang y Kodos en calidad de anfitriones en el futuro) debería estar más abajo, al menos por debajo de la de Cuentos de la cripta, pero ya sea por el prejuicio de “aún estamos en la etapa de Carlos Revilla”, porque recuerdo nítidamente la emoción de estar ante mi primer Halloween emitido en primicia en España en lugar de las reposiciones con las que me tragué los anteriores o por el gag del sofá recopilatorio/halloweenesco, mi percepción está nublada y lo pongo en el puesto que lo pongo.

9º) La casa árbol del terror IX: La idea es tan evidente que me cuesta creer que no se usara hasta el noveno especial de terror. De hecho, podría haber sido la presentación del segundo Halloween. Pero es el especial IX el que cuenta con la versión halloweenizada del opening de toda la vida, con una estupenda aparición de Freddy y de Jason al final (atentos a los créditos, Robert Englund presta su voz). Antena 3 tiene especial predilección por escamotearnos esta introducción en particular.

8º) La casa árbol del terror XI: Graciosísima es esta parodia del opening de Los Munsters, que por otra parte la serie venía pidiendo a gritos, porque los papeles les van que ni pintados a la familia. Esta es la última introducción de Halloween realmente inspirada y sin que salga nada que la arruine. De hecho, la licencia final es bastante divertida. Por cierto, no sé si es un error o algo intencionado, pero desde siempre, esa pantalla del televisor sin ningún crédito ME PERTURBA.

7º) La casa árbol del terror VII: Las intros de los especiales sexto y séptimo me fascinan. Los episodios eran demasiado largos, así que las introducciones se reducían al mínimo (igualito que ahora…). Resultado: escenas de pocos segundos, sin palabras y tremendamente efectivas. Ésta en concreto, con Homer pegándose fuego accidentalmente, a muchos les parecerá una chorrada, pero a mí me gusta. Y desde luego, le dan cien patadas a las pésimas, insípidas e injustificadamente rebuscadas intros actuales.

6º) La casa árbol del terror VIII: “Mi deber es protegerles de la realidad”, gran ironía con la que se satiriza a la censura de la violencia, aunque de una forma menos sutil que en el primer especial. Este opening es gracioso y ciertamente inquietante, y aunque hace uso y abuso de la violencia al más puro estilo temporada 13 (por ejemplo), sigue siendo un clásico de las introducciones de las Casa árbol. Además, quién se resiste al “ja, ja, ja, ja… no”. Por cierto, este gag de sofá es mi favorito de todos los de Halloween.

5º) La casa árbol del terror II: Esta introducción es difícil de valorar, al ser casi un calco de la anterior (con el memorable añadido de “hay muchos más tacos”). Por eso mi intención era ponerla justo un puesto por debajo de ésta, para mantenerlas juntitas. Claro que luego pensé que la que ahora ocupa el cuarto puesto me gusta más, así que aquí la tenemos, en el quinto puesto. Aún hoy, cuando un episodio de Los Simpson comienza con un telón rojo dando paso a Marge, me entra un ligero escalofrío.

4º) La casa árbol del terror VI: Éste fue el primero de los dos openings de Halloween inusualmente cortos, y una secuencia excelente con Krusty de Caballero sin Cabeza. El hecho de que se resulte tan chocante (sobre todo si antes sólo se han visto las cinco presentaciones anteriores, al estilo clásico) es una baza a su favor, a la que sumamos una gran ambientación lograda en pocos segundos, no como ahora, que… Bueno, vale, ya me callo.

3º) La casa árbol del terror I: Sí, ya, no se llama “1”, pero yo se lo añado para guardar la coherencia. Ya hemos entrado en el pódium, con un clásico entre los clásicos. La inicial, la original, la primera vez que Marge salió a escena para advertirnos que el programa de hoy es de mucho, mucho miedo. Absolutamente eficaz, y con el toque siniestro de que diferencia a un episodios de Halloween de los demás, como debería ser. Por supuesto, la pulla hacia la obligación de advertir sobre posibles contenidos violentos y hacia los adultos que se tiraban de los pelos por aquella época ante la peligrosa serie amarilla es estupenda, muy propia de aquellos elegantes primeros signos de mala leche que caracterizaban a la segunda temporada; y no se puede caracterizar mejor a Marge en tan pocos segundos. También merece la pena añadir que esta secuencia precede a un Halloween de calidad superior, con unos niveles de majestuosidad en el tratamiento del tema terrorífico que jamás se volverían a tratar en la serie.

2º) La casa árbol del terror III: La tercera introducción de Halloween de Los Simpson nos guarda una sorpresa. Para no hacer repetitivas las apariciones de Marge, ésta vez el encargado de advertirnos fue Homer, protagonizando una de las mejores referencias cinematográficas de todas las que han aparecido en la serie. Hablo, por supuesto, de la de la presentación a lo Hitchcock, con banda sonora incluida. Absolutamente enorme, y con tal nivel de genialidades por segundo que sólo había una forma posible de llevar a cabo un opening mejor…

1º) La casa árbol del terror V: Este Halloween lo tiene todo. No sólo se conforma con ser el mejor de los veinte realizados hasta ahora, con introducir muchas de las referencias más geniales e inteligentes de toda la serie (y no hace falta decir cuáles), con ser el único que cuenta con una extraña conexión entre los tres segmentos, o con lograr llevar a cabo la proeza de cerrar con un repentino (y legendario en lo que a mí respecta) número musical sin caer en el ridículo más absoluto. No. Además de todo esto, la quinta Casa árbol del terror tiene la mejor secuencia de introducción de todas. También es la segunda más larga, algo que está más en consonancia con las últimas temporadas que con el periodo al que pertenece; con la diferencia de que mientras que hoy la longitud desmesurada se debe a que la idea absurda de turno se estira lo máximo posible con vistas a que así acabe haciendo algo de gracia gracia, esta joya dura un minuto y medio largo porque contiene tantísimas cosas ingeniosas juntas (tal vez deberían haber guardado material para futuros especiales, viendo cómo está el patio) que era imposible hacerlo en menos: el regreso de la clásica introducción de Marge (ausente en el cuarto Halloween), el homenaje a En los límites de la realidad estropeado por un genial Homer (homenaje que incluso sin conocer la referencia resulta estupendo, inquietante), la aparición de los demás springfildianos para dar color al ya clásico recorrido por el cementerio… A todo esto cabe sumar el hecho de que es la última vez que veríamos una introducción halloweeniana al estilo clásico. Después de esto, se acabó la aparición de Marge frente al telón, se acabó el recorrido serpenteante por el cementerio, con sus “lápidas divertidas” (de hecho, fue la sequía creativa en este aspecto lo que llevó al equipo a acabar con las introducciones clásicas), y se acabó el gag de sofá terrorífico, aunque éste volvió tres temporadas después para desaparecer definitivamente tras el décimo especial.

Está claro que jamás volveremos a ver un opening de Halloween tan bueno como los que encabezan el top, ni siquiera como el sexto o el séptimo de la lista. Así que sólo nos queda perder nuestro tiempo deseando que se produzca el milagro. Lo más curioso es que en el fondo de nuestro corazón aún guardamos la esperanza. Hum. Ciertamente éste es un universo desconcertante.