¿Estaba todo pensado?

Lo que vais a leer a continuación es mi primera entrada de encargo, sugerida, suplicada, exigida por una pobre persona que necesita que una autoridad de la red como yo le apoye en sus teorías sobre los aspectos más desmitificadores de La guerra de las galaxias. La saga perfecta, o al menos la que más se acerca a la perfección. ¿Cómo es que yo, grandísimo admirador de la saga desde los cinco años (mi Retorno del jedi grabado de Canal Sur, con la mosca antigua y todo, ay) me voy a atrever a apoyar a ese gusano y cuestionar la magnificencia de la Gloriosa Trilogía? Bueno, eso es porque comparto su opinión, y porque en realidad no voy a cuestionar nada incuestionable. La magnificencia de la saga quedará intacta tras mi artículo de hoy, pero eso es porque no creo que poner un poco de orden y razonar ciertas cosas perjudique a nadie. Ni a la Guerra de las galaxias. Mis notas en filmaffinity seguirán siendo 10, 10, y 9 respectivamente (eh, y 6, 7 y 8 para las otras, y un puto suspenso para la peli de Clone Wars), y las amaré como siempre las he amado. No me gusta tener que ponerme tan cerebral con unas películas de naturaleza tan evasiva, pero la inevitable presencia cuando hablamos de un fenómeno como éste de una comunidad de no fans, sino fanáticos, a veces te lleva sin remedio a situarte en un extremo en cierto modo opuesto al que no te gusta llegar. Pero no os apuréis, la entrada de hoy será tan desenfadada e hilarante como de costumbre, incluso más que aquella sobre el Holocausto de hace unos meses.

"Mira, George, ahí entra otro a la Edición Especial Ahora Sí Defintiva..." "¡Juaaajajajaja, qué gilipollas!"

La pregunta es, ¿cuánto de verdad hay en la historia de que George Lucas tenía toda la saga de La guerra de las galaxias pensada antes de ponerse a hacer la primera? ¿Qué hay del culebrón familiar que nos trajeron los episodios V y VI, ya estaba previsto por tan brillante mente? ¿Soñaba Lucas ya en 1976 con un anfibio patoso que dos décadas después amenizaría a los jedi con sus divertidas ocurrencias y con el que alimentaría los sueños y fantasía de millones de niños y no tan niños? Para todo lo que viene a continuación no me he documentado en absoluto, si obviamos datos que ya conocía de antes. La entrada de hoy es pura disertación, porque no hay pruebas concluyentes de La Verdad ni tan siquiera en fuentes oficiales. George Lucas, romántico empedernido, gusta de relatar desde finales de los noventa la historia de cómo su primer borrador de la historia, escrito en los lejanos y discotequeros setenta, tenía por nombre algo así como Las aventuras de Mace Windu, caballero Jedi, como queriendo demostrar de forma irrefutable la magnitud de su capacidad visionaria con tan vaga afirmación. No cuela, George, los auténticos visionarios dirigen cosas como 300. Aunque también es cierto que una película con Windu de protagonista, bajo el hipotético nombre de Black Wars, encaja de maravilla en los setenta. Es muy bonito pensar que ya antes de filmar el episodio IV en 1977 Lucas ya tenía en mente incluso el germen de lo que serían las tres precuelas, pero es mucho más plausible pensar que en 1999 Lucas recuperó el nombre de Mace Windu simplemente para dar forma a esta ilusión. Es un poco como lo que hizo el equipo de Futurama, que desde el principio llenó la serie de objetos en segundo plano y chorradas varias sin motivos concretos, con el infantil entusiasmo del que sabe que en el futuro puede aprovecharlos, darles una razón de ser en episodios posteriores y hacer que a los fans se les caiga la baba.

Who's the black jedi dick that's a sex machine to all the chicks? MACE! Ye daaaaaamn right.

En esta línea cronológica creo que sólo puede haber una marca determinante: 1980. La saga propiamente dicha no comienza hasta El imperio contraataca, cuando George Lucas ya sí tenía un éxito gigantesco en su haber y la idea de concebir personajes y tramas a largo plazo era algo ya no plausible, sino también a tener muy pero que muy en cuenta. Antes de eso, me cuesta creer que el por entonces humilde y delgado George tuviese algo más que un deseo irrefrenable de sacar aunque fuese un par de dólares con La guerra de las galaxias para arreglar las goteras del salón. Antes de 1977, nadie daba un duro por aquel proyecto de serial espacial de sábado por la mañana actualizado. La Columbia y la Universal dieron largas a nuestro amigo, y Coppola fingía no estar en casa cuando Lucas llamaba a su puerta lastimeramente pidiendo limosna para su película. En la Fox la historia habría seguido el mismo camino de no ser porque el director ejecutivo del estudio, Alan Ladd Jr., vio cierto potencial en el proyecto (seguramente inducido por el efecto de algún alucinógeno, recordemos el contexto histórico) y le dio luz verde. A partir de aquí cada lector puede escoger el camino que más le guste:

a)      Si quieres que George se crezca delante de la mesa de Ladd y le exija cobertura económica para las varias secuelas y precuelas que tiene pensadas para su segurísimo superéxito de taquilla, pasa a la página 43.

b)      Si quieres que George de gracias humildemente y se vaya pensando en la potra que ha tenido y rezando para que la película pueda al menos llegar a los cines y devolver algún miserable beneficio, pasa al siguiente párrafo.

Es muy probable que entonces George se fuese a su casa, cogiese todos los conceptos dispersos que tenía en mente y los ordenase y filtrase para dar lugar a una historia potable y sencilla. Puede que en el tintero se quedasen ideas que luego se retomarían en El imperio contraataca y El retorno del jedi (y para de contar), pero eso está a kilómetros de algo parecido al “¿ves? Ya lo tenía todo pensado” que enarbolan asustados muchos fans galácticos, temiendo que cualquier otra cosa empañaría el brillo de la saga. Ni siquiera creo que el culebrón familiar estuviese entre esas ideas descartadas por el momento. Lo de Vader casi puedo verlo debatible, ya que la revelación del episodio V encaja de forma casi milagrosa con todo lo visto en el IV, pero lo de Leia parece ya más un pegote de culebrón sudamericano que otra cosa, pese a que puedo creerme que esto ya si estuviese pensado para cuando se hizo El imperio contraataca (de hecho lo estaba seguro, mirad la película). La explicación más plausible para mantener el sentido de esta escena podría ser la siguiente: Obi Wan pide a Luke que por una vez haga un esfuerzo y que adivine quién es su hermana; y a Luke, que no ha visto demasiadas mujeres en su vida, no se le ocurre otra cosa que “¡Leia! ¡Leia es mi hermana!”. Obi Wan le mira sopesando el nivel de estupidez de alguien que ignora las casi nulas probabilidades de que de entre todas las mujeres de la galaxia su hermana sea precisamente la que tiene más a mano y que ha estado junto a él durante cuatro años por pura casualidad, pero cansado de tratar de insuflar sensatez a esa cabeza de corcho, lo deja por imposible y le da la razón. Sí, hijo. Leia es tu hermana. Anda que buen polvo te has perdido.

Quizá su hermana era ésta. (Imagen cedida por la Fundación Fernando Polanco Pro Erotismo Geek)

Lo de Vader encaja mucho mejor, pese a que muy posiblemente eso sí surgió a posteriori. La única explicación de la categoría “ya estaba todo pensado” que aceptaría es que Obi Wan metió la pata hasta el fondo, confundió a Luke con el hijo de otro caballero jedi que sí murió a manos de Vader, y cuando horas después se dio cuenta de que la había cagado, Luke ya estaba bastante emocionado con la idea de ir a cargarse al asesino de su padre con un sable láser y no quiso quitarle la ilusión. Los sutiles comentarios con los que Obi Wan trata de matizar su desafortunado comentario (“eh, bueno, Luke, matar está muy bien, pero recordemos a veces las cosas no son lo que parecen…”) no sirven de nada, así que varios años después decide reaparecerse oportunamente en forma de fantasma explicando que los caminos de la Fuerza son inescrutables y que la explicación a su trola es demasiado compleja para que Luke la entienda. Como Luke no se queda contento con esta salida cogida por los pelos, Obi Wan trata de arreglarlo con un desafortunado “en cierto modo era cierto, ¿no?” y una sonrisilla poco convincente. “¿En cierto modo?”, responde Luke lamentando no haberse enterado cuando Obi Wan aún era corpóreo y podía ser estrangulado. Digamos que si George hubiese sabido desde el principio que Vader iba a ser el padre de Luke no habría puesto a Obi Wan a decir algo como lo de “traicionó y asesinó a tu padre”, que no es que sea ambiguo, es que es una patraña como un castillo. Podría haber sido peor. Obi Wan podría haber dicho “traicionó y asesinó a tu padre… con un cuchillo jamonero”. Me habría encantado ver a Obi Wan tratar de explicar esto en El retorno del jedi recurriendo a vagas metáforas sobre la Fuerza y mirando continuamente el reloj como si fuese a perder el metro.

¿Pero por qué sobrevive Vader al final del episodio IV? ¿No habría sido lo natural en todo relato de manual sobre el bien contra el mal (y La guerra de las galaxias lo es) que el villano, sobre todo un villano de la talla de Darth Vader (confeccionado con todas las características asociadas al malvado definitivo, al mal supremo al que hay que vencer matándolo), acabase convertido en poodoo de bantha? Esto es lo único que me perturba y me hace pensar en un vestigio de deseo de proseguir la saga por parte de George mientras hacía Una nueva esperanza. Un vestigio completamente ilusorio, claro, recordemos la pinta de bodrio que tenía aquello en la sala de montaje; pero cuántos de los que grabamos cortos o hacemos chorradas de ese tipo nos gusta fantasear con secuelas para las que dejamos algún cabo suelto. La persona que me empujó a escribir esto (Belén, mira que como no me comentes esta vez te retiro la palabra…) opina que si Vader sobrevive al final es porque en el episodio IV parece más un sicario de pacotilla que el villano principal, repitiendo insistentemente lo de que incluso le llaman “el perro Vader” con su correa y todo, y supongo que asumiendo que el malo es Moff Tarkin. Tal como yo lo veo, la situación de Vader es un requiebro magistral al rol convencional del villano, al que en este caso le han puesto un supervisor que controle sus raptos de ira y destrucción; que ya hemos visto en El imperio contraataca que Vader tiene la mano muy suelta (“fistro, que tienes menos futuro que un oficial de crucero en El imperio contraataca”). Y es que nadie introduce de lleno al villano en un conflicto personal con el protagonista para luego hacerle huir sin enfrentarse al héroe ni nada.

Salacious Crumb reacciona a un fan que le pregunta si le hicieron firmar el contrato seis años antes de "El retorno del jedi".

Esta es una de las lagunas (si es que es una laguna y no una licencia de George) del Episodio IV que El imperio contraataca logra llenar. Una nueva esperanza, si la miramos aisladamente, es un cuento espacial maravilloso, pero también un guión lleno de agujeros. No empañan el resultado (“su ingenuidad y ternura fue la solución”), pero están ahí. El entrenamiento de Luke se sugiere y poco más en Una nueva esperanza, pero no porque se planease continuarlo en el futuro, sino porque… se deja a medias sin más, para beneficio fortuito de las dos siguientes películas. No hay más que ver la cara del joven paleto durante la celebración final. En lo que al él respecta, su entrenamiento termina en cuanto le dan una medalla, como Patán. Y sin alejarnos demasiado de este asunto, ¿no debería la rebelión guardarse las celebraciones y el champán para cuando destruyan de verdad al Imperio? ¿O es que ha habido otras celebraciones ostentosas, una por cada diminuto caza imperial derribado? ¿Basta cargarse una estación espacial para hundir a un malvado imperio que se extiende por toda la galaxia? Si lo que quieres es destruir al Imperio volando algo por los aires, al menos reserva tus explosivos para la mansión del Emperador en Sudamérica. Mucha ceremonia de victoria a la primera de cambio y luego pasa lo que pasa, que los rebeldes se ven apiñados de mala manera en una ruinosa estación en el polo más frío del planeta Hoth, perseguidos por un Imperio cabreadísimo y encima sin champán para entrar en calor. Lo que ya digo: los irresponsables agujeros de Una nueva esperanza engrandecen a El imperio contraataca hasta alturas inimaginables, que ya desde el principio comienza con un jarro de agua fría, racionalizando esa victoria de pacotilla contra el Imperio al final de la película anterior.

Se puede alegar una vez más que “todo estaba pensado” para convertir estos agujeros en “cosas a explicar en las secuelas”, pero me resulta una visión tan ingenua… Ya estamos en los noventa (suena mejor que cualquier dato verídico) y estamos acostumbrados a que cualquier bodrio nazca como parte de una saga, pero ya me diréis quién hacía eso en los setenta. Ni El padrino surgió como parte de una saga. Puede que la primera película que nació como parte de una saga, y tampoco de la forma en la que ocurre hoy día, fuese En busca del arca perdida, y no creo que haga falta fecharla. Tal como yo lo veo, en La guerra de las galaxias original había tantos detalles intrascendentes que muy bien podían aprovecharse en el futuro para dar cohesión a la saga. Personalmente me encanta la mención a las Guerras Clon, y que Lucas aprovechase tan minúsculo detalle para la columna vertebral del guión del episodio II es una idea brillante que une más las distintas películas que cualquier Jar Jar Binks añadido digitalmente al final El retorno del jedi. Pero mi detalle favorito luego aprovechado es sin duda la mención al misterioso Jabba The Hutt, cuya latente amenaza para el culo de Han y ausencia hasta El retorno del jedi da muchísima fuerza al personaje. Deduciréis por esto lo mucho que odio la inclusión en 1997 de la escena aquella con Han y Jabba (o su equivalente digital no sindicado) antes de salir de Mos Eisley, que en vez de dar cohesión a la saga se carga de un plumazo la fuerza inherente al personaje que se menciona pero no se ve. Por cierto, amigos del “todo estaba pensado”, seréis felices de tener esa infame escena rodada en 1977 para probar que El retorno del jedi ya existía en la mente de George en los tiempos de Una nueva esperanza, pero… ¿seguro que estaba todo pensado? ¿Seguro?

La Gloriosa Trilogía no dejará de ser gloriosa sólo por no haber sido concebida como un todo desde el principio, y creo que ése es el error que cometen los ultras galácticos y que les lleva a considerar como pruebas de omnipotencia lo que tiene todas las papeletas de ser un puñado de lagunas e improvisaciones más o menos conseguidas. Como si estas nimiedades resintiesen la calidad de la saga. Veo más meritorio que George hubiese sabido improvisar una red de causalidad a partir de lo que en realidad era casualidad que la rocambolesca idea de que todo estuviese pensado desde el principio. No todo salió perfecto en ese juego de malabares que se monto el buen hombre para dar forma a las secuelas, pero sigue saliendo un balance admirable entre lo que está perfecto y lo que no está tan bien.

Reflexión final: Impagable debió ser la reacción del actorzuelo que hacía de Jabba cuando veinte años después de haber sido eliminado sin compasión del montaje final, vio cómo George recuperaba la escena sólo para taparle con una especie de enorme zurullo espacial generado por ordenador.

11 comentarios en “¿Estaba todo pensado?

  1. ¿No existe el dicho de «Cada día se aprende algo nuevo»? Me ha ocurrido varias veces pero esta me ha sorprendido. ¿Así que Jabba al principio era un hombre rechonchón que hablaba normal en vez de un gusano asqueroso? Esto sí que no lo sabía pero para nada. Ni en reportajes, ni en documentales.

  2. Si los guionistas de Lost no lo tenían todo pensado desde el principio, Lucas en los setenta tampoco había inventado la palabra Midiclorianos. Ea, ya está; es todo lo que tengo que decir. :P

  3. Hola, Sr. Roselló y compañía. Aunque llevo unos meses disfrutando de este blog, la verdad es que nunca me había visto impulsado a comentar nada. Supongo que porque tampoco tenía nada interesante que decir.

    Que no es que quiera decir nada reveladormente impactante ahora, claro. Ejem ejem: yo abogo firmemente porque el amigo Lucas no tenía ni repajolera idea de lo que estaba haciendo cuando lo hizo.

    Fan de la saga como siempre he sido, amén de guionista en proyecto, hace unos años me leí el libro Star Wars: the Annotated Screenplays, de Laurent Bouzereau, en el que comenta el desarrollo guionístico de la trilogía original. Que si Anakin Starkiller por aquí, que si Lando era un clon por allá… El caso es que éste explica claramente que en el primer draft (y único) que escribió Leigh Brackett para el Episodio V, bajo la supervisión de Lucas, ni Vader era el padre de Luke, ni su hermana era Leia, ni nada de nada. La historia iba por otro lado. Luke sí que tenía una hermana gemela, pero ésta era un personaje nuevo que se iba a llamar… no me acuerdo. Bueno, el caso es que… no me acuerdo. Tú sabes cual, Marge, ése que tenía un coche azul.

    En fin, que voy a escribir un comentario más largo que el propio post. Star Wars no fue concebida por completo en el 77, por mucho que a Lucas le guste dejar caer la idea de cuando en cuando. Lo cual tampoco es malo. Para mí eso le otorga a Lucas y a sus películas más mérito aún, la verdad.

    Tremendo blog, por cierto. Me lo paso teta leyéndolo.

    1. ¡Excelente información! Me interesa muchísimo el libro ése que mencionas, a ver si me lo agencio de algún sitio. Lo de Leigh Brackett me sorprende, dada su presencia en los créditos en calidad de guionista junto a Kashdan pensé que habría hecho bastante más que un primer tratamiento. Por esa regla de tres Darabont debería haber aparecido como guionista en Indy IV, ¿no?

      Ah, y cómo no, gracias por la parte que me toca.

      Pd.: Señores, no se corten con los comentarios largos, que a mí también me gusta leer lo que dicen otros.

  4. Pues yo voy a disentir en mucho de lo que has comentado.

    Yo creo que sí que tenía todo pensado desde el principio. Pero todo, no es lo que tú estás considerando porque rozas el límite de lo ridículo en tu exposición para defender tus ideas. No sé ni por donde empezar ni cómo estructurarlo, pero voy soltando mi visión del tema así a brochazos.

    Partimos de la base que dices que Lucas deja muchas cosas ni abiertas ni cerradas. Todo parece fruto de «chapuzas» que luego ha hilado en la historia. Tanto que te gusta ponerte en contexto, vamos a ponernos en contexto. No te coge la peli ni Perry, cuando alguien te la coge, renuncias a tu sueldo entero para llevar a cabo la peli (y los de la Fox renunciaron al 100% del merchandising pero eso es otra historia que da para mil posts), vas con la hora pegada al culo, y además, los efectos especiales son un truño, y el montaje es un espanto.
    Si te pones en esa situación, Lucas no sabía si podría continuar su historia o no. La historia de esa primera trilogía estaba hecha (y me lo creo), pero no puedes jugártela a dejar todo abierto y que parezca al 100% seguro que va a continuar la cosa, y si luego no funciona, dejar a la gente colgada, porque eso queda COMO EL CULO (¿alguien ha visto Mario Bros la película y su final? ¿Donde está su secuela?), o bien puedes hacer lo que hizo Lucas… dejas a Vader vencido, pero vivo, a Obi Wan muerto, pero siendo «algo más», etc.
    Es una forma de haber hecho la película a la espectativa de ver qué pasaba. Con el resto de películas no ha amagado tanto, porque ya sabía que iba sobre seguro. Yo lo veo algo lógico y comprensible, qué quieres que te diga.

    Te quejas de que no sabía que haría precuelas. En el año 1980 (cuando Lucas por fin sabe que va a pisar sobre seguro como he comentado antes), coge y le planta un «Episodio V» a la segunda película. La gente flipa en colores con la numeración y le dice que qué pasa, y Lucas sólo responde que esto son 6 pelis, y que primero cuenta el final, y ya contará lo otro. Eso es así, y otro tema es que haya tardado 20 años en hacer las precuelas, pero su visión de «6 pelis» lleva instaurada desde el principio (desde el principio que ve su historia viable, claro).
    Por cierto, lo de «las aventuras de Mace Windu y la madre que parió a Paneque», también es cierto, hay fotos y documentos que lo atestiguan.

    Volvemos a detalles de las películas que te debato así que me hayan venido a la mente:

    – La «mentira» de Obi Wan sobre el padre de Luke. Aquí estoy CONVENCIDO de que Lucas sabía que Vader sería su padre. Volvemos a lo de antes. Ante un proyecto del que no sabes la viabilidad futura, lo dejas ambiguo, pero lo dejas. Por favor, mírate la interpretación del gran Alec Guinness en esa escena. Cuando le cuenta eso, su forma de hablarle a Luke es algo diferente, mira un par de veces a otro lado antes de hablar, y no es el mismo tono ni expresión en la cara que cuando le comenta otras cosas. No sé qué le diría Lucas a Guinness y probablemente nunca se sepa, pero Lucas, que es muy de guardar secretos a cada personaje, estoy convencido que le dijo a Alec «no te voy a decir el qué pasa, pero lo que le cuentas, no es cierto, pero no quieres que se note». Total, también a Dave Prowse le hizo decir en la escena de Vader-Luke que «Obi Wan es tu padre» (en el audio de estudio es la frase que se dijo, y sólo a Mark Hamill le dijo la verdad), y eso no quiere decir que planee sobre la marcha, eso quiere decir que lo tiene bien pensado. Mira justo ese trozo de actuación de Guinness y lo entenderás.

    -Jabba. Comentas el «pobre hombre que se quedaría perplejo cuando le borraron y pusieron a un muñeco encima». De perplejo nada. Lo sabía perfectamente cuando se rodó la escena. Esa escena iba a llevar desde el primer momento un muñecajo insertado por stop-motion. El guión original habla de que es un bicho, no un humano, y si quisiesen a un humanoide, le hubiesen plantado una careta el actor de Jabba y tirando. Esa escena iba a hacerse con stop-motion sí o sí, y poniendo un muñeco encima, pero volvemos a lo del principio. Prisas, prisas y más prisas, y casi volver a editar toda la película y mejorar los efectos especiales hicieron que la escena se quedase apartada.

    -Las guerras clon: De hecho, el escrito de «Mace Windu…» ya citaba a las guerras clon, y yo SIEMPRE supe que los soldados de asalto eran clones. Siempre he creído que el universo expandido es una basura y yo leí hace chorrocientos años en no se donde que eran clones y no reclutas (y encontré algo del año 77 en internet, no recuerdo el qué, que ya decía que los soldados eran clones). El que Lucas venda la licencia para poder escribir sobre ella cosas «no canon», y digan que son reclutas y no clones, pues tiene validez 0, muy a pesar de los que siguen más el universo expandido que la propia saga, y rabiaron como nadie con el Episodio II y decían que Lucas se equivocaba al decir que eran clones. Y yo pensando allá en 2002… «Pero si lo llevan siendo TODA la vida»

    -Personajes varios. Esta es una excusa banal y fácil. Claro que Lucas no tenía en mente a Jar Jar hace 30 años, ni a Salacious Crumb antes de hacer el Retorno del Jedi. ¿Acaso los Wachowsky tenían a Monica Belluci o a los gemelos en mente cuando hicieron la primera Matrix? Pues no, se tiene una idea MUY GENERAL de por donde va la historia, y luego ya añades elementos secundarios, y a veces, elementos principales en el transcurso de la producción de la película. Pero sí, a rasgos generales, estaba todo pensado (todo lo que tiene que estar pensado con 6 años de antelación al escribir la historia, claro)

    Y bueno, que no me extiendo mucho más que mañana curro y me tengo que ir yendo, pero ya vas por donde van mis tiros. Yo SÍ creo que estaba todo pensado, pensado y escrito hasta el nivel que tiene que estar pensado y escrito, y con una primera película hecha de tal modo que si sale bien la apuesta (porque fue una apuesta muy gorda) se puede continuar y por fin atar cabos, y si no sale bien y la peli no resulta, tampoco quedan cabos excesivamente abiertos o sueltos.

    De todas formas, es mi forma de ver la historia, con un seguimiento que sabes que ha sido casi diario a lo largo de mi vida y basándome sólo en cosas oficiales y no las novelas.

    Una cosa tengo clara, sólo 1 persona sabe si en lo cierto estás tú o lo estoy yo: George Lucas. Pero cuando le ví en Agosto no se le podían hacer preguntas. Lo intentaré en la próxima :-P

    Saludos!!!

    1. Pero hombre, no te burles de mis menciones a Salacious Crumb y Jar Jar, que eso es puro cachondeo. ¿Cómo no va a ser banal y fácil?

      En tu favor digo que olvidé totalmente lo del letrero de Episodio V, que tenía pensado incluir en el párrafo de la incertidumbre (donde me extraño de que Vader sobreviva) porque era un dato demasiado relevante, y también para ser justos con el hombre. Sin este detalle en realidad el texto parece bastante tendencioso…

      Con lo de Jabba, me extraña mucho que entonces se le haya vestido con las pintas de payaso selvático en vez de dejarle con el chándal adidas, pero si lo dices con tanta seguridad, pues me lo creo. La postdata, cómo no, no es más que un chiste que se me hacía irresistible incluir (tener la oportunidad de llamar a Jabba zurullo espacial).

      Lo de «Obi Wan era tu padre» me lo sabía, pero ni pensé en incluirlo porque no vi la relación que tenía con la historia ésta. Al pobre David Prowse siempre lo dejan en la inopia, que pena me da el hombre.

      Y, eh, podría estar aquí discutiendo todo el día, pero yo tambien me tengo que largar ya y no puedo extenderme. Ah, tengo que decirte, con ademán de villano que se gira en su sillón ante la entrada de su némesis, «te esperaba».

  5. A mí lo que siempre me fascinó de la escena original del Jabba de carne y hueso (porque sí la conocía desde hace lustros) es la frase final de Solo: «Jabba, you’re a wonderful human being».

    Estupenda disertación kevinsmithniana. Yo te apoyo en la creencia de la improvisación porque, joder, es que se nota a saco… Pero, ¿qué más da?

    Hoy en día la gente piensa que improvisar en el proceso creativo de la narrativa es malo. Parece que si no está todo pensado desde el principio, se sienten perdidos (fíjate que chiste fácil se puede hacer de esa última frase) y les entran mareos y vértigos. Recordemos que Indiana Jones lo hacía todo sobre la marcha.
    Mientras luego todo tenga coherencia interna, dadle al jazz (la música, no el personaje volador).
    El problema surge cuando tienes que añadir un montón de fe ciega para que la historia tenga sentido por completo.

    PD. El comentario sobre el final de Mario Bros del tertuliano anterior me ha hecho recordar la última escena de La Liga de los Hombre Extraordinarios… ¿Coña o cliffhanger? Rememoremos el final de (oh sí) Regreso al Futuro, con el Delorean volador y el destino del hijo de Marty. Zemeckis siempre dijo que era un chiste final, pero que la gente se quedó las ganas de ver ese futuro y, voilá, dos secuelas al canto. Improvisadas y maravillosas. Todavía hay quien espera Regreso al Futuro IV porque el tren temporal ese prometía mucho (y molaba un huevo).

    PPD. Sigo dando el coñazo. Un día un profe cachondo de filología nos puso un experimento audiovisual de un director ruso (nadie llevaba gafas de pasta allí, lo juro) que consistía en lo siguiente: A tres audiencias se les mostraba una breve escena de un tipo (primer plano) con expresión neutra y a continuación un plano con otra cosa.
    A la audiencia (A) se le proyectó la cara del tipo y luego el primer plano de un `plato de comida.
    A la audiencia (B), la cara del ruso y luego una mujer.
    A la audiencia (C), el susodicho y después una niña muerta en un ataúd con flores.
    Al final de las sesiones, se les preguntó a los tres grupos qué emoción expresaba el actor. El grupo A contestó que, claramente, mostraba hambre. El B dijo que un amor perdido y el C aseguró, CONVENCIDO, que, sin ningún género de duda, el hombre, con su seriedad, ocultaba un dolor y una tristeza inmensas.

    Yo ahora no puedo ver la trilogía original sin pensar que R2-D2 estuvo al tanto de todo. Y seguro que hay alguien en el mundo que diga que siempre se le notó.

  6. Lo que dice Alejandro es uno de los experimentos tradicionales del Agitprop. Hicieron cosas parecidas cambiando la ambientación musical con efectos muy similares y de ahí tenemos las bases de algunas pistas de sonido que, si uno mantiene la frialdad intelectual, resultan de un epatante que te cagas.

    Sobre el tema en sí: creo que Lucas tenía una idea general que luego fue cortando, pegando y deformando poco más o menos que según le iban ayudando los amigotes y compadres que le hicieron todo el trabajo sucio (sobre todo el de guión, tal como las precuelas demuestran). Creo que entre el material original y el final el parecido debe ser como entre la duquesa de Alba y Charlize Theron.

    Saliendo del tema pero sobre la saga. El otro día, en un arranque de curiosidad, le pedí a un amigo, fan de la saga, información sobre si existía alguna versión en DVD sin las horrendas últimas modificaciones (las de 1997) aún me parecían aceptables que introdujo Lucas para retconnear la cosa. Encontró copia de las versiones en Laser-Disc, no perfectas pero muy aceptables, y mientras comíamos dejó puesta la primera en la tele. Quizás fuese el paso del tiempo pero me sorprendió la… no sé, la sensación de ser todo tan tópico que me daba la historia. Está bien construida, funciona, pero me parecía que había tantos lugares comunes que, de repente, me parecía vacía.

    En ese sentido, creo que la primera de las películas aprovecha muchos lugares comunes (el chaval granjero surgido de la nada que se convierte en un héroe por sus talentos naturales heredados de un familiar «noble», el antihéroe de ambigua moralidad, el compañero fuertote pero poco sagaz, la princesa, el malo que acojona y el malo eminencia gris…) que ya existían previamente, los combina de forma efectiva y te ofrece una película de aventuras clásica con elementos novedosos de forma que no se nota que es algo que ya se ha contado previamente con otro formato. A la vez, esa misma historia, se convierte en la fuente de tópicos y lugares comunes que luego son explotados por otras nosecuántas producciones posteriores que, por un motivo u otro, ignoran el manantial original.

  7. Bueno, aquí un infiltrado de los foros de Eldoblaje.com que viene a saludarte, Rose.
    Me ha gustado tu artículo, y aunque adoro las dos trilogías (aunque por mi edad soy más de Star Trek, je, je), coincido en todas las incoherencias que detallas, las cuales por cierto no le quitan ni un ápice de encanto a las películas.
    Efectivamente, la idea de que la saga iba a alargarse proviene de la segunda película «El Imperio», y recuerdo que Lucas hablaba, no de seis, sino de NUEVE películas, aunque ahora el muy ladino se desdice.
    Aporto detalles que conozco:
    1) La escena de Jabba ya aparecía en la novelización de George Lucas (o su negro, dicen que fué Alan Dean Foster), así como en la adaptación en cómic de Marvel, de 1977, donde era un extraterrestre humanoide, no parecido ni de lejos al Jabba que conocemos.
    2) La frase que hicieron decir a David Prowse fué en realidad «Obi Wan mató a tu padre».
    3) En lugar de hacer a Luke y Leia hermanos, sería mejor una solución que imaginamos un amigote y yo una noche de borrachera hace unos 30 años: que Leia fuese, en realidad, hija de Obi Wan, el cual gozaba de los favores de la reina de Alderaan.
    4) Viva el doblaje, viva Constantino Romero y todos los demás.
    Un abrazo.

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